Cómo suena Tetuán.

La música andalusí y el bullicio del zoco son sin duda sus sonidos carismáticos, pero hay otros.

• El sonido de la seda y de la máquina de coser en el barrio de la Mellah. Las mecánicas puntadas de la máquina, el motor de un viejo secador o batidora, y de fondo, la vibración del hilo que se retuerce.
• Los dados en los cubiletes, que resuenan entre eufóricas conversaciones en torno al tablero de parchís, aupadas de vez en cuando por el vítore de una jugada diestra.
• La voz del mohecí marcando el paso del día.
• La de los críos llenándolo de vida, con los apresurados pasos de sus carreras tomando las curvas como bólidos.
• Conversaciones de televisores y transistores que se acercan y se alejan.
• Alguna moto inesperada por el barrio Blad.
• El correr del agua de skundo bajo la tierra, que si se busca no se encuentra.
• El viento en la puerta Bab Ruah.
• El eco de tus pasos por la medina dormida.

…y muchos más que irás descubriendo en tu paseo por la ciudad.